Que el futbol profesional está en constante evolución lo sabemos todos. Pero, ¿que posición se
ha transformado o desarrollado más a lo largo de las últimas décadas? Sin duda, esa posición es
la del portero.

Actualmente, el arquero tiene mucha participación dentro del equipo, si hacemos una
comparación con porteros de antaño veremos que sus funciones se han multiplicado. Cada vez
más, los entrenadores demandan porteros que sean capaces de controlar las diferentes facetas
del juego actual, tanto ofensiva como defensivamente. En este sentido, podemos remarcar,
principalmente, dos elementos que en los últimos años han propiciado un cambio en la forma de
entender el rol del portero. Por un lado, la regla que, a partir del año 1992, impide a los arqueros
recoger el balón con las manos si este les viene cedido por un compañero. Por el otro, la
evolución de los modelos tácticos, con la consecuente tendencia a jugar con presión alta y
defensas adelantadas.

A continuación detallaremos algunos aspectos del juego que debe controlar un portero que
pretenda tener éxito en el fútbol actual.
📌 Juego ofensivo: El portero debe ser un jugador más cuando el equipo tiene el balón, ya no
solo vale con girar el balón de un lado al otro, sino que debe ser capaz de crear superioridad
numérica, atraer rivales, encontrar el hombre libre y así romper líneas de presión con sus pases.
Para que esto ocurra se necesitará que el portero tenga un buen juego de pies y el conocimiento
táctico acorde a cada situación que se le presente.

📌 Controlar el espacio que hay detrás de la línea defensiva: Una gran cantidad de equipos
suelen jugar con su línea defensiva adelantada, muchos entrenadores pretenden que sus equipos
realicen presiones altas, sean cortos y compactos. Esto lleva a que, en algunas acciones del
partido, los centrales se sitúen en mitad del campo. Lo cual obligará al portero a actuar como
libero y tener que estar pendiente de interceptar los balones que se puedan filtrar detrás de dicha
defensa adelantada.


📌 Juego aéreo: Es de vital importancia que el portero sea capaz de brindar seguridad en este
tipo de acciones que se suelen repetir bastante durante los partidos. La gran calidad de los
lanzadores a la hora de golpear el balón más la cantidad de jugadores que se acumulan en él
aérea, hace que estas situaciones sean bastante complejas de resolver. Son acciones que
demandan un alto grado de coordinación, técnica y determinación.


📌 Comunicación: El portero es el jugador que mejor campo de visión tiene dentro del campo,
por lo cual la información que pueda aportar a sus compañeros será de vital importancia. Esta
deberá se corta, clara y en el momento adecuado. Si el portero es capaz de ser un buen
comunicador evitará innumerables situaciones de gol del equipo contrario. En muchas ocasiones,
con la boca se ataja más que con las manos. Aquí hablamos de las paradas invisibles.


📌 Parar: Aunque avancen los años y todo evolucione, esta función seguirá siendo la principal y
más importante para el portero. Su trabajo en portería, en su área pequeña, seguirá siendo
determinante.


Este es el portero moderno, un jugador más que puede utilizar sus manos dentro de un área
determinada. Un jugador que deberá tener una gran comprensión del juego y la inteligencia ha de
ser la característica que lo define.